sábado, 18 de septiembre de 2010

ÁNGELA REYES

Pelirrojos a la mar
    Obra de la pintora Liliana Lucki

( l945- Cádiz) Obras: "La muerte olvidada" "Amaranta" "Carméndula" y otras.
 
      Ella fue la señora de la noche.
 
Ella fue la señora de la noche
la que tasaba al hombre y le medía
el crepúsculo rojo de su vientre
el sube-y-baja- mar de su entrepierna.
Ella, tan linda,
tuvo todos los hombres que pariera la luna,
 y los que dio la tierra.
También los que escupió la mar,
 y a los que el tren alejó olvidados
en medio de la noche tan llena de amargura.
A todos ella tuvo entre sus brazos,
entre sus piernas solitarias.
Muy dentro de sus medias,
al final del corpiño, donde la luz es grande.
Los tuvo sobre el beso, sobre el pubis,
junto a su cuello de algodón tostado.
A todos poseyó,
y nunca por amor, ni por dinero,
sino por compartir el pan redondo de la risa
y el migajón de la ternura.
Ahora es la vieja del recuerdo
y cría cabras en isla Perejil.
Aquel cordón de seda verde,
que sus amantes
varias vueltas liaban en su talle,
hoy es cuerda que con el cubo va al aljibe
buscando agua fresca,
cuando la soledad se le acurruca,
como un perro en la niña de sus ojos.
 
  de: "Historia de mujer con echador"
 
  Confesión de lectora:  me conmovió  muchísimo este poema, reunió toda mi atención con su verso final bello, concreto, devastador.  La poeta , en una obra extensa, narrativa-descriptiva, ha tomado el tema de la temporalidad y sus efectos-consecuencias. Un halo biográfico vagabundea sobre los renglones aportando datos físicos , atrayentes, de la protagonista, con su poder de seducción, y cuya motivación de conquista es muy bella: " compartir el pan redondo de la risa ". Impecable elección de recursos otorgan la ternura nacida "sobre el beso, el pubis, el cuello de algodón tostado"  . 
 
corresponsal Susana Zazzetti
 

3 comentarios:

  1. REALMENTE UNA BUENA POESÍA Y EL ACIERTO DE LA SEÑORA SUSANA AL COMENTAR ESOS VERSOS FINALES QUE EFECTIVAMENTE DEVASTA CON SU PESO.

    EDGAR BUSTOS

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  2. Una poesía que todo lo envuelve, la palabra se extiende una vez más cuando acaba el verso, vuelve en imágenes de bellísima ternura y el final "como un perro en la niña de sus ojos".
    Sin estribos, muy buenos.
    Chachi Dellate

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  3. Una poesía envolvente y quiero rescatar la pintura, una belleza, me encanta que tenga esa fuerza, esos colores.

    Andrea Casas

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