sábado, 27 de abril de 2013

Carlos Arturo Trinelli







Asunto: Despedida (*)




Estimado Bernardo Kessler, así comenzaba el correo electrónico que me enviara Enrique Lotriski y que abrí un lunes en la redacción del Ancla Oxidada. Un lunes que despuntaba tranquilo por la ausencia de mi jefa Magdalena López Arias. Esta tranquilidad era cómplice de mi desgano sin control.
      El correo de Lotriski aportaba una dosis de curiosidad después de haber transcurrido más de un año desde que le hiciera la trabajosa entrevista que una vez publicada dio origen a la investigación de la policía literaria. Desde entonces Lotriski había tomado la decisión de desaparecer y desde ese  entonces su imagen se fue desvaneciendo en mi, atrapado en lo diario y en mi propia resistencia.
      He leído más de lo que he escrito…y señalaba una serie de libros, también  he tomado notas y elaborado conclusiones para futuros escritos que he decidido no escribir pero( que sacar) mi vanidad no se resigna a perderlos y los recibirás en breve por el correo tradicional en la sede del Ancla Oxidada para que dispongas de ellos incluso para tirarlos a la basura cosa de que la jamás me enteraré ni deseo hacerlo. Entre esos escritos va un resumen de cuatro carillas a doble espacio del libro Contraluz de Thomas Pynchton  por si “La Magda” te ordenara ese trabajo (broma).
      He adquirido una gelidrofobia? que me impulsa a romper con los puentes, vos sos el último y última será esta comunicación. Te he elegido por ser joven y saber que en un punto (¿cósmico?) nuestro derrotero se roza. Repasemos ahora la memoria de tus lecturas: Obituario de Enrique Lotriski
      Esta mañana los restos del extinto señor Enrique Lotriski fueron trasladados desde su residencia (aquí y al no poseer residencia deberás inventarla cosa que no será original en el divorcio que existe entre nuestra noción ideal del mundo y la realidad, creo que la idea era de Flaubert)…para ser inhumados en… (Ídem paréntesis anterior).     El caballero desaparecido era una figura muy popular y simpática de nuestra ciudad (¿), y su fallecimiento(sin motivo aparente dado que es literario) ha repercutido dolorosamente entre los (lectores) de todas las esferas sociales (¡Ja!) dejando una sombra de inconsolable pesar (dos¡Ja!).Las exequias en las que estuvo presente (nadie)…del extinto fueron a cargo de los señores… (Vagos varios todos borrachines filosóficos). Asistió al duelo Lunita Laredo amante entrada en carnes que acompañó los últimos intentos literarios de amores imposibles. La dama aseguró que el muerto creía que el cuento se correspondía mejor que la novela con la idea fragmentaria, relativa, inconexa, que tenemos de nuestra existencia, idea que había adquirido en su trato con Lola Umbral. Luego de dejar solo al muerto, los vivos fueron a festejar en un famoso bar de la zona. Enseguida comprendí la paráfrasis del Ulises de Joyce.

      Al leer los “códigos del escritor lumpen” de Néstor Sánchez: 1)no hacer carrera literaria-2)no ganar ningún premio nacional-3)no hacer periodismo-4)no hacer publicidad, me di cuenta que los he cumplido, he tenido la conducta que demanda el ser lumpen, no sé si iluminada porque humano al fin confieso que me he desviado en los atajos del truísmo víctima de una innata inocencia que los años no aplacaron como se sabe son capaces. Mis diferencias conceptuales con Sánchez consisten en que jamás teoría alguna me hizo perder la cabeza ni la teoría de Ezra Pound que declama cantar al amor y al ocio que nada más merece ser habido. Para mi no es un aserto (pequeña digresión heterosexual: La mujer posee poco contaminado los defectos y las virtudes del instinto conservado como en un disco rígido desde el fondo de los tiempos, entonces ¿alguien se atreve a probar el ocio como sustento del amor?).
      ¿O existe el “por amor al arte” en  el mundo que nos toca vivir? (por no hablar de otros mundos del que solo tenemos referencias escritas). Coincido sí en la alegría del vino tinto sin la ambigüedad discursiva del Zen, este concepto es un hallazgo revelador, un ascua brillante.
     Veritas liberavit vos (San Juan) y lo único que no miente es la experiencia y esta me indica que mi cuerda literaria llegó a su tope. Supervivir es lo primero y para ello hay que justificar al mundo. Si, abandono, correré riesgos, pero al mismo tiempo dejaré atrás todo lo que me rechaza, lo comprendí, creo, al leer a Baigorria.
     Nada más que despedirme con un afecto que no ha perdido su épica.
                                                                    Enrique Lotriski

     Supo Lotriski sembrar la duda en mi ánimo con su planificada ambigüedad y apelaciones a escritos que me pareció reconocer como adornos de una idea que, cuando quien la proclama es un ilustre desconocido, necesita de los fundamentos aprobados.
     ¿Era su obituario un juego en el que solo abarcaba lo literario? De ser así, en algún sitio continuaría su supervivencia. Como sea, tuve el presentimiento que el personaje Lotriski era historia.


(*) Culminación de la saga En búsqueda del Lotriski perdido, El pintor de las luces, Episodios del intento de Enrique Lotriski por desaparecer, todos publicados en este medio con anterioridad. C.A.T.


9 comentarios:

  1. Leí con pesar este texto , me había encariñado con Lotrinski, era un loco lindo, o ..es..
    No me gustan las gelidrofobias, me parece una cobardía romper puentes...estos nos llevan o nos traen...pero son necesarios y guardan una ilusión , una fantasía , un deseo de encontrar elementos que nos permitan la supervivencia. Ademas mi concepción de la Historia es que esta no es un hecho pasado , sino actual, vigente.
    Ha muerto Lotriski , Viva Lotriski!!

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  2. Muchísima ironía, como me gusta, muchas lecturas entre líneas...policía literaria...Lo disfruté mucho y lo disfrutaré en la re lectura-Gracias

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  3. y vivirá entre " vagos borrachines filosóficos". así sea! un saludito. susana zazzetti.

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  4. Nadie puede imaginar como me apena la partida de Lotrinski. Estoy tentada en creer en las resurrecciones . ¿Me escuchas, Trinelli? Probá y decí varias veces : ¡Levántate Lotrinski, levántate y anda! . Sé que si te vas no se va a arruinar mi carrera, pero temo perder feligreses fanáticos de tus astutos rebusques y variadísimos recursos.
    Cristina Pailos

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  5. Es muy valiente a la vez Arturo lo tuyo. Cuesta hacer desaparecer, matar, despedir, incluso cuando hablamos de escritura Tantos personajes tuyos me han quedado en la cabeza con sus formas, sus modos de ser, con sus idas y vueltas, asi debe ser a mi criterio, como en la vida.
    Abrazo amigo querido.

    Lily Chavez

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  6. Despedir a un personaje implica duelo personal y publico. Y como se expresa muy bien aqui, su supervivencia continuara mas alla del autor. Gusto en saludarlo, Trinelli. ElsaJana.

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  7. Debe haber dolido escribir esta " muerte literaria", pero muerte al fin, de quien nos acompañara tanto tiempo, con un enfoque ácido, irónico, y con cierta certeza que se lo volverá a encontrar.
    Quizás venga a Pehuajó de incógnito.
    Entrañables estas historias.
    Un gran abrazo.
    MARITA RAGOZZA

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  8. eSTE EL PRIMER COMENTARIO DEL NÚMERO. NO SÉ COMO PUDE EDITAR ESTA N{UMERO CON LA PC ANTERIOR (TORTUGA, NO RESPONDE, ME SACA LA LENGUA: TUVE QUE COMPRAR UNA PC NUEVA O ME HUBIESE TENIDO QUE RETIRAR A CUARTELES DE VIEJO)L
    CHE TRINELLI, ¿PORQUÉ ME MATASTE A LOTRIZKI? BUEN{ISIMO Y TRISTE.
    ANDRÉS

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  9. Las muertes literarias tienen la ventaja de que pueden ser anuladas, cambiadas, mejoradas y hasta refrendadas...Se que Lotriski tiene aún muchas palabras en su mollera y espero que decida ordenarlas en frases, párrafos y relatos de sus aventuras en la "otra" vida.

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